CÓMO COCINAR CON LOS NIÑOS Y ADOLESCENTES¡Al rico pescado!
Fomentar unos hábitos de alimentación adecuados en tus hijos e hijas implica tu participación activa, a lo que hay que sumar mucha convicción, un poquito de imaginación, y por supuesto, que no falte la paciencia y el cariño. Recuerda que lo que viven en casa marca su aprendizaje, puesto que los más pequeños aprenden por imitación. |
¡Al rico pescado!
- Evita los que tienen más espina
Para que los más pequeños coman más pescado, quizá lo más conveniente sea que
compres piezas que no tengan problemas de espinas, como por ejemplo lomos o filetes
mejor que rodajas. Además hay pescados como, emperador, atún, perca y mero, lenguado,
fletan o halibut y rape, entre otros, que son una buena elección, dado que no
suelen presentar ninguna espina.
- Fíjate al principio en las especies que les gustan más y céntrate en ellas,
Pero cambiando la preparación para no cansarles. Puedes recurrir a distintas técnicas
y salsas que suavicen un poco su sabor y olor, o los encubran levemente (bechamel,
mayonesa, tártara, etc.). No olvides que las salsas a veces hacen milagros. El
rebozado y empanado también mejoran su aceptación.
- Prueba con pescados de distinto mordiente o consistencia
Si el pescado no gusta porque su consistencia es muy blanda, recuerda que existe
una gran variedad, de modo que no hay excusa alguna para que evitéis su consumo.
Son pescados de consistencia más firme: emperador, atún y bonito, salmón, rape,
bacalao, congrio, perca y mero...
- Atrévete con pescados desconocidos y anímales a que los prueben
Si lo que ocurre en casa es que tiendes a escoger entre 2 ó 3 variedades de pescado
(merluza, lenguado o gallo) y siempre las cocinas igual, esto puede resultar aburrido
y provocar rechazo. Conviene que varíes el tipo de pescado o las técnicas culinarias,
lo que dará como resultado una dieta más equilibrada y apetecible. Por ejemplo,
la merluza es un pescado que da mucho juego en la cocina. Se puede saborear rebozada
junto con una ensalada y salsas, al horno con patatas panadera, en salsa verde
con guisantes y marisco, al horno sobre un fondo de zanahoria con cebolla y gratinada
con queso, en pastel o croquetas junto con gambas, como ingrediente del relleno
de pimientos, etc.
- Sopas de pescado
Una sopa con tropezones de pescado bien caliente, entona el cuerpo, y puede resultar
interesante cuando tu hijo o hija llega a casa destemplada o inapetente. Y si
quieres que el plato sea energético, agrégale pasta fina (fideos, estrellitas...),
arroz, sémola o patata cocida, además de trozos de pescado cocido desmenuzado
y, porque no, algo de verduras y marisco troceados, etc.
- Platos de pescado que "llenan"
¿Te suena la frase el pescado no me llena? Según se cocine, un plato de pescado
puede saciar tanto o más que un guiso de carne. Prueba con unos lomos de bacalao
en salsa verde con gulas, gambas y dados de patata o con un filete de pescado
cocinado sobre salsa de tomate y acompañado de patatas paja y un poco de mayonesa,
¿llena o no llena? Seguro que se te ocurren otras recetas igual o más sabrosas
y consistentes.
- De primero... Pescado
Paella de arroz con congrio, rape y gambas; arroz con chipirones; macarrones con
sardinas y salsa de tomate, espaguetis con atún y verduras; lasaña o canelones
de bonito, de bacalao o de marisco; patatas con bonito (marmitako)... ¿Se te ocurren
más ideas? ¡Seguro que sí! Éstas son algunas sugerencias que forman parte de una
lista innumerable de recetas en las que la combinación de vegetales y productos
de mar, dan lugar a platos nutritivos y equilibrados.
- Ensalada y ensaladillas
Es casi seguro que tu hijo o hija esté acostumbrado al sabor del atún o del bonito
en conserva mezclado con las ensaladas. Puedes hacer esto mismo con el resto de
conservas de pescado (anchoas, sardinas), creando ensaladas variadas con distintos
sabores. También puedes ofrecerles las conservas de marisco (pulpo, mejillones,
berberechos...), como ingredientes de ensaladas o como aperitivo. Y, ¿has probado
a presentarles el pescado en forma de brocheta? Seguro que les resulta más divertido.
- Flanes de pescado
Flan, budín o pastel de pescado o de marisco son maneras originales de comer estos
alimentos. Los puedes servir fríos o calientes, y además combinan muy bien con
verduras, de manera que haces los platos más variados, vistosos, sabrosos y nutritivos.
¿Te atreves con estas sugerencias? Flan frío de gambas y espárragos, budín de
cabracho, pastel de salmón... Y otras más que te puedes encontrar en esta Escuela.
- Relleno de platos: pimientos, croquetas, empanadillas, huevos
¿Se te ocurre una manera mejor de aprovechar restos de comida o de incluir el
pescado y disimular su sabor? Así puedes hacer más variado el menú y la presentación
de los platos, y al fin y al cabo, consigues lo que pretendes: que tus hijos coman
más pescado y se vayan acostumbrando a su sabor. Aunque estos platos requieren
más tiempo de elaboración, si haces más cantidad, puedes congelar lo que sobre,
lo que te ayuda a preparar una comida o una cena cualquier día, sin apenas esfuerzo.
- En tortilla
Más típicas en unas zonas del país que en otras, las tortillas o los revueltos
que llevan pescado te van a resultar, además de sabrosos, muy nutritivos. Tortilla
de bacalao, revuelto de ajos frescos o espinacas y gambas, tortilla de atún, de
sardinas o de anchoas... Son algunas de las sugerencias que os brindamos para
vuestras comidas o cenas.
- En bocadillo
Una alternativa muy nutritiva, saludable, y que les puede resultar deliciosa es
que les prepares bocadillos con pescados en conserva, como por ejemplo, bocadillo
de atún o bonito y rodajas de tomate; de atún y queso; de sardinas y unas gotas
de aceite o un poco de mantequilla; de anchoas y queso; vegetal con atún o anchoas;
de salmón ahumado con queso a las finas hierbas; de paté de atún; de mojama...
El gusto es educable, así que nunca es tarde para que prueben nuevos sabores.
¡Sorpréndete y sorpréndeles!
- Pizzas caseras
Si incluyes trozos pequeños de pescado como un ingrediente más de las pizzas,
tan apreciadas por los más pequeños, también estás fomentando el consumo de este
alimento. Puedes emplear pescado en conserva, ahumado, congelado o cocinado a
la plancha. Si lo combinas con vegetales resulta un plato muy completo y equilibrado.
¿Te animas? Pizza de atún, con sardinas o anchoas, con salmón ahumado, marinera
(trozos de rape, gambas y palitos de cangrejo).
|